En el mundo digital, la paleta de colores juega un papel fundamental en la experiencia del usuario. Más allá de la estética, los colores también impactan en aspectos tan cruciales como el consumo de energía, la salud visual y la atención del usuario. En este contexto, surge una interesante estrategia: el uso de tonos apagados, una tendencia que va más allá de lo visual para ofrecer beneficios tangibles.
En Berlo entendemos estos beneficios y los hemos adoptado como parte de nuestra identidad y estrategia de marca para mejorar la experiencia del usuario dentro de nuestro sitio web.
A continuación, te contamos los beneficios que, para nosotros, han sido parte fundamentales en la estrategia de comunicación el hacer uso de tonos apagados en nuestro sitio web.
Eficiencia Energética:
El ahorro de energía se ha convertido en una preocupación creciente en la era digital. Los dispositivos electrónicos, desde móviles hasta laptops, consumen energía de manera significativa, y cualquier medida para reducir este consumo es bienvenida. Aquí es donde entran en juego los tonos apagados, ya que, al utilizar colores menos intensos, se requiere menos energía para su visualización, lo que se traduce en una prolongación de la vida útil de la batería y en un menor impacto ambiental.
Protección de la salud visual:
La emisión de rayos azules por parte de las pantallas digitales ha levantado preocupaciones sobre el impacto en la salud visual. Los tonos apagados, al carecer de esta emisión intensa, proporcionan un entorno más amigable para los ojos y esto se traduce en una reducción de la fatiga ocular y en una menor exposición a los riesgos asociados con la luz azul, como el insomnio y la degeneración macular.
Consideraciones a la salud: Epilepsia y TDAH
Para aquellos que tienen episodios de epilepsia o tienen TDAH, la elección del esquema de colores puede marcar la diferencia entre una experiencia digital segura y cómoda, o una potencialmente peligrosa. Los tonos apagados ofrecen un alto contraste sin los elementos visuales que podrían desencadenar convulsiones en personas que sufren episodios de epilepsia. Además, al eliminar distracciones visuales, como colores vibrantes o parpadeantes, se promueve una mejor concentración, lo que beneficia especialmente a aquellas personas con TDAH.
Accesibilidad para todas las personas
Por último, pero no menos importante, los tonos apagados hacen que el contenido digital sea más accesible para personas con dificultades visuales. Al eliminar la ansiedad asociada con los colores brillantes y la emisión de rayos azules, se crea un entorno digital inclusivo y legible para todos.
Con lo anterior, podemos decir que la adopción de tonos apagados como parte de nuestra estrategia en el diseño de nuestro sitio web no solo es una cuestión estética, sino una estrategia inteligente para la experiencia del usuario que visita nuestra página. Al priorizarlo, no solo creamos una experiencia digital más agradable, sino que también hacemos una contribución significativa hacia un mundo digital haciéndolo más sostenible, inclusivo y ecológico.
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